David Paniagua, asesor legal de Fabol, ratificó ayer que la huelga es firme y continuará hasta mientras no se cancele la deuda a Arce.
" No es que por un jugador se pare todo un campeonato, se trata de un principio de justicia, todos los jugadores hacen fuerza común de manera solidaria, Oriente Petrolero debe pagar la deuda que tiene con Arce, de lo contrario, lamentablemente no habrá fútbol profesional", sostuvo Paniagua.
El directivo de los futbolistas bolivianos, señaló que la postura de Oriente Petrolero es inaceptable, toda vez que los directivos se niegan a conciliar criterios para encontrar una solución.
Por su parte, Mauricio Méndez Roca, presidente de la Liga del Fútbol Profesional Boliviano (LFPB) lamentó que la huelga de Fabol afecte un campeonato oficial y a los restantes 11 clubes, que no tienen nada que ver con el problema entre Arce y Oriente.
" Se han resuelto los demás casos, con la excepción de Arce con Oriente Petrolero, un problema entre dos afecta a todos, esto es lamentable", sostuvo, al confirmar que la primera fecha del torneo Apertura se suspende y se reprogramará a futuro.